Aplastemos el fascismo es probablemente la imagen más célebre y más icónica de Pere Català i Pic, el padre de la saga familiar. De formato vertical y en blanco y negro, muestra el pie de un hombre, calzado con una alpargata de cintas, que está a punto de pisar una cruz gamada sobre un suelo de adoquines.
Si explora con detalle el diagrama táctil, notará que la estructura de la esvástica tiene algunas grietas, lo cual hace pensar que el impacto de la pisada ya se ha producido poco antes con anterioridad. Sobre la cruz de color blanco, el pie cubierto con la alpargata tradicional catalana queda suspendido en el aire, a pocos centímetros del suelo. En la parte superior izquierda de la imagen, una pequeña línea de relieve señala el borde del pantalón que deja al descubierto el tobillo con las cintas ligadas. El suelo de adoquines, no representado táctilmente, está mojado, con algunos hilillos de agua entre las junturas.
Esta fotografía, publicada por primera vez en el diario La Vanguardia en octubre de 1936, ilustró uno de los carteles de guerra más destacados de la historia, que editó el Comisariado de Propaganda de la Generalitat de Catalunya, dirigido por Jaume Miravitlles y del que Pere Català i Pic fue el jefe de ediciones. Un ejemplar original del cartel de la época, de 70 centímetros de ancho por un metro de alto, se expone en esta muestra junto con la fotografía.
Aunque Català i Pic ha pasado a la historia en gran parte por la potencia de esta imagen, lo cierto es que ya era todo un referente de la fotografía publicitaria y un pionero del fotomontaje. En realidad, la imagen del cartel estaba muy pensada previamente. Los hijos de Català i Pic se encargaron de comprar pasta blanca en la calle Tallers de Barcelona para modelar la esvástica. El fotógrafo y su hijo Francesc, que entonces tenía 14 años, se dirigieron al edificio de Capitanía General, frente al puerto. El pie de un mosso d’esquadra, alzado sobre el símbolo nazi, acabaría dando la vuelta al mundo. El escritor y político francés André Malraux lo consideró como uno de los 50 mejores carteles de guerra de toda la historia.
Esta fotografía, realizada cuando todavía no se habían mostrado todos los horrores del fascismo y el nazismo, se convirtió en un eficaz instrumento de propaganda política en la medida que el cartel original no contiene palabra alguna: toda la fuerza se concentra en la imagen. Català i Pic era un gran amante de la concreción i la inmediatez: creía que el mensaje debía llegar directamente desde la visión y no desde la lectura.
Cartel de propaganda sin texto con una alpargata y una cruz gamada, publicado por el Comisariado de Propaganda de la Generalitat de Cataluña, que el propio Pere Català i Pic había ayudado a crear. Aplastemos el fascismo se publicó por primera vez en La Vanguardia el 24 de octubre de 1936.
Barcelona, septiembre-octubre de 1936
Pere Català i Pic
de Francesc Català-Roca
de Pere Català i Roca
de Pere Català i Roca
de Francesc Català-Roca
de Francesc Català-Roca