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La fotografía que ahora comentamos en el ámbito de lo social, muestra un desfile de gigantes y cabezudos en el paseo de Gracia de Barcelona, durante las fiestas de la Virgen de la Merced del año 1962.

La imagen, como es habitual por la época, es en blanco y negro. Si explora la lámina táctil desde la derecha hacia la izquierda, las líneas en relieve marcan las figuras que hay en el primer plano de la fotografía. Un gigante, de presencia imponente, avanza de frente hacia nosotros. A su lado, un hombre, acompañado por tres chavales -probablemente sus hijos-, parece vigilar de cerca el movimiento del gigante y tener control de la situación.

Puede comparar las dimensiones de las figuras humanas respecto a la altura del gigante, ataviado como un caballero medieval, con vestimenta muy ornamentada y cinturón, un gran escudo cubriéndole el pecho, y la cabeza cubierta por un elmo, o casco de forma cónica rematado por un haz de plumas blancas. El gigante, de grandes ojos negros y bigote prominente, sostiene con su mano derecha la empuñadura de una maza que descansa sobre su hombro.

Tras este gigante, el desfile se extiende a unas cuantas figuras más, en este caso no representadas táctilmente. En fila india y separados por unos cuantos metros, una procesión de más gigantes avanza por la calzada del paseo de Gracia, ante la admiración del público que contempla la escena desde las aceras. En el lado izquierdo de la lámina táctil, se ha representado, con textura de puntos, el follaje de uno de los árboles que flanquean el paseo.

El autor de esta imagen es Pere Català i Roca, un fotógrafo que dedicó buena parte de su obra a una de sus grandes pasiones: la cultura popular catalana, en todas sus manifestaciones festivas y tradicionales. Destacó también como investigador y divulgador de los “castells” o torres humanas, una tradición fuertemente enraizada en la localidad tarraconense de Valls, de donde eran originarios los Català.

Fotografía representativa: ¿Qué?